Ganas de compartir

1.1 millones de Tweets por hora son muchas ganas de hablar ¿no? Según un estudio de Pingdom, ese es el volumen medio del uso que se hace de Twitter en los Estados Unidos. Si lo trasladamos a un año serían aproximadamente 10 billones de Tweets al año.

A eso le llamo yo ganas de compartir. Está claro que Internet está cambiando. Poco a poco (o mucho a mucho más bien) esa red que nació para compartir información, realmente esta desarrollando esa misión. El rol que jugamos los usuarios es cada vez más importante. Por fin, nuestra opinión importa.

¿Quién define una comunicación efectiva?

Las marcas se tendrían que hacer está pregunta más o menudo. Una comunicación no es efectiva por ser la más creativa, la más diversificada en medios, ni siquiera por ser la más premiada. Lo será cuando el consumidor diga que lo ha sido.

Y para averiguarlo, hay que aprender a "escuchar". No es tarea fácil, pero sí necesaria. "Escuchar" en la calle es complicado, pero en la red no lo es tanto. Es cuestión de estar ahí, como uno más en la conversación.

Después de escuchar, hay que actuar respondiendo a lo que demanda el consumidor de la marca. Darle lo que se espera de ella, de sus productos/servicios y de ella como "ente relacional".

La torre de WeBabel

Respondiendo a la pregunta que lanza Rodolfo Carpintier en su blog mi respuesta es: "Sí". Yo hablo muchas jergas del webiano: hablo el Facebookese, el Twitterlinés, el Readeriano, el Deliciousuñol; y cada día intento aprender más.

Es importante y creo que es lo que irán poco a poco demandando más la empresas. El modelo tradicional de comunicación está demasiado maduro para que siga siendo rentable. Las herramientas para compartir el conocimiento se encuentran cada día más centralizadas en la web. La información se comparte en tiempo real, no ya sólo por los departamentos de comunicación de las empresas, sino por los canales personales de los mismos trabajadores.

Pero además, tiene sus ventajas. Por ejemplo, recientemente yo accedí a una entrevista de trabajo por un "twitt" que lanzó una de las personas que yo sigo. La información en tiempo real es un privilegio para todos, empresas y personas. Por eso yo aprendo y practico "idiomas".